En el silencio

Busco palabras,
pero manda en las manos
una incertidumbre lívida,
casi transparente,
que amordaza el alma.

¿Dónde está tu voz, que no la siento?
En mis labios se agrieta la sed perenne
de no saberte.
Y aun así,
ahí
mi gratitud.

Huyo del silencio
y sin embargo,
en el silencio, tú.

Comentarios

  1. La voz se halla en un recuerdo de otro tiempo y mis labios rasgados murmuran casi en silencio un nombre marchito. Y despierto de esa ensoñación traidora que es dulce veneno embriagador. Y me entrego a la abstracción, al vació. A un vano momento en el que dejo el tiempo correr y mis ojos se beben sus lagrimas y mi corazón parece olvidarse de latir.

    Mas no quiere saber de tristezas, de melancolía. Y vuelvo a abrir mis ojos y los vuelco a un verso incompleto que tiene escrito ese nombre de antaño. Hay! pérfido corazón que me encadena el alma y me habré al azar de sus antojos en noches lejanas las viejas heridas por las cuales siento el alma envejecida y mis versos tristes...

    PD: Es bello y hermoso por donde se lo lea como la pequeña y peculiar flor que se habré a la vida en una mañana de invierno.

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    1. Qué precioso comentario.... poético! Mil gracias por tus palabras y lecturas. Abrazo!

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